En calma y tranquilidad, se realizaron los comicios en el sindicato de músicos

Ernesto Aroche Aguilar

A pesar de que el pasado martes Alejandro Sánchez Bonilla había anunciado un posible fraude en los comicios que se realizaron el día de ayer en la sección 53 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Música, fue en un ambiente de tranquilidad que la decisión de 466 electores dejaron en sus manos la dirección del organismo gremial.

Así, la planilla roja que encabezaba Sánchez Bonilla acabó con la hegemonía del grupo afín a Gerardo Corte que buscaba, mediante la planilla amarilla, reelegir a Jaime Rodríguez Solís.

Luego de los comicios, que fueron calificados como ejemplares, transparentes y “una prueba de civilidad” por Filemón Arcos Suárez, dirigente nacional de los músicos, se contabilizaron 736 votos, de los cuales 466 bastaron para terminar con las pretensiones de Rodríguez Solís y lo obligarán a abrir los archivos para comprobar cómo se han gastado desde hace tres años las cuotas sindicales que mensualmente podrían reportar hasta 27 mil pesos, producto de los 25 pesos que entregan los mil 98 afiliados.

Por lo pronto, Bonilla adelantó que será en asamblea como se definan los términos de la próxima auditoría: “Yo hago lo que mis compañeros decidan. Lo vamos a estudiar; no sabemos todavía, no quiero adelantar nada; vamos a tomarlo con tranquilidad y tomar decisiones que convengan a todos los músicos; vamos a pensar en ellos”.

Lo anterior a pesar de la beligerancia que mostró sobre el particular durante la rueda de prensa que ofreció el martes pasado, en donde se adelantó que se esperaban acciones violentas durante los comicios, como robo de urnas y acarreo de votantes, cosa que al final no sucedió.

Por su parte, Arcos Suárez indicó que hasta después de la protesta de Sánchez Bonilla se analizará si se presenta una demanda en aras de clarificar la situación del patrimonio sindical en Puebla.