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Puebla > Estado
viernes 11 de agosto de 2006

Cuestionan investigadores el uso de los cañones para dispersar nubes en Cuyoaco

Josué Mota Corro

Las pruebas que presentó el pasado 7 de agosto Enrique López Fernández Moris, presidente de la empresa Vegetales la Concepción, que realiza los cañonazos para dispersar las nubes en la zona del municipio de Libres y Cuyoaco, son manipulables y por lo tanto no son una muestra concluyente científicamente, opinaron ayer investigadores de la UAP y de la UAT.

Los campesinos que se oponen a la utilización de estos cañones ya han bloqueado la carretera federal y la autopista Puebla-Teziutlan para manifestar su descontento. La situación, como se informó ayer, obligó al secretario de Gobernación, Javier López Zavala a intervenir en el asunto a fin de establecer una “tregua” que compromete a los labriegos a no continuar con los bloqueos y a la empresa Vegetales la Concepción a dejar de emitir los cañonazos.

Con los documentos que entregó el empresario, en una rueda de prensa celebrada el martes de esta semana, intentó demostrar a los medios de comunicación que la utilización de sus cañones no tiene ningún efecto en las precipitaciones pluviales. López Fernández entregó algunos de boletines emitidos por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), acompañados de una gráfica que contiene el promedio de precipitación pluvial.

Sin embargo, el meteorólogo, Raúl Mayorga Rapozzo –investigador del Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales (Cupreder), de la Universidad Autónoma de Puebla–, dijo que para demostrar que no existen afectaciones no basta una gráfica. Este reportero le mostró al especialista el documento entregado por el empresario de Vegetales La Concepción y después de unos segundos el experto opinó: “la demostración de la gráfica no es muy concluyente, demostrar que hay afectación es muy difícil, sólo lo podríamos decir con cierta probabilidad”.

“Lo que se tiene que hacer es tomar los cuatro años en que se han utilizado los cañones como una muestra estadística, y se tiene que demostrar que la muestra es parte del universo. Si la muestra resulta diferente al universo entonces podríamos hablar de una afectación., pero aun eso tiene un rango de probabilidad”, abundó.

Con 20 años de experiencia, Mayorga Rapozzo, entrevistado la mañana de ayer, reiteró que las gráficas no son concluyentes y afirmó: “se necesita un estudio estadístico porque estamos considerando una variable aleatoria, que en este caso es la lluvia. La estadística da mayor confiabilidad”. Y los datos son manipulables “porque no se demuestra que esta muestra pertenece a la población”.

Por otra parte, el doctor en Geografía Ambiental, José Jiménez López, de la Universidad Autónoma de Tlaxcala, considera que para determinar la afectación a las precipitaciones pluviales no basta con un recuento de los promedios en los últimos cuatro años.

“Para determinar si realmente la utilización de lo cañones antigranizo tiene efectos ambientales es necesario hacer un estudio de las condiciones orográficas del lugar, pues posiblemente no haya efectos en las zonas muy cercanas a las emisiones, pero si en lugares un poco más alejados”, explicó.

El investigador opina que si las gráficas muestran un promedio alto no necesariamente significa que no hay una afectación generada por los cañones. “Para explicar la cantidad de lluvias en este año es necesario analizar muchos factores, por ejemplo los huracanes que se han sufrido este año en la República Mexicana. Este año tampoco hubo canícula, es decir; hay muchos factores que explican las lluvias que no están relacionados con la utilización de los cañones”, afirmó.

Entrevistado vía telefónica la tarde de ayer, Jiménez López manifestó que “es muy importante revisar la frecuencia con que se disparan los cañones porque esto si puede ser un factor importante. En muchos pueblos se utilizan cohetes para alejar a las lluvias pero se hace muy pocas veces por año, por lo tanto no provocan afectaciones”, abundó.

Ambos investigadores coincidieron en que un estudio especializado es fundamental para determinar las posibles afectaciones.

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