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Puebla > Política
martes 8 de agosto de 2006

Crónicas del zócalo del DF

Día séptimo

Gerardo Oviedo

Lo imposible se hizo posible: dos poblanas conquistan el corazón de México y ganan el primer lugar en el concurso “Bailando contra un fraude”, en el zócalo del Distrito Federal. Acto organizado como parte de la resistencia civil pacífica convocada por la Coalición por el Bien de Todos. Doña María Socorro Acuña, de 95 años, y doña Noemí Aguilar, quien argumenta que tiene 15 años, a pesar de que el cabello entrecano y la curvatura de su espalda delatan muchos, muchos años más.

Horas antes de comenzar el concurso, Andrés Manuel López Obrador ha pronunciado su discurso del domingo y los poblanos se sumergen en una convicción más férrea. Nadie va a pasar sobre nuestra dignidad, dice José Guadalupe, quien llegó de entrada por salida a la asamblea permanente mientras se quita el sombrero porque se va a entonar el himno nacional, y es falta de respeto no descubrirse. Vinieron en un autobús pagado con sus propios recursos. Y entonces ¿no es acarreado como dicen en muchos medios de comunicación?, se le interroga. ¡Esas son pendejadas!, contesta molesto cuando termina de cantar, y es que sólo tienen dos horas para llegar al autobús después que termine el acto. A nosotros nadie nos paga; venimos por convicción. Venimos porque queremos un verdadero cambio en México. Y que esos rateros de siempre sean quitados del poder. ¡Ya basta de tanta porquería! Y sale disparado hacia 20 de Noviembre esquina con 5 de Febrero, donde los espera el camión que los llevará de regreso a Puebla. “Porque allá la gente también se organiza y no nada más el movimiento es de aquí (DF); por ejemplo, allá, en este momento en el zócalo de Puebla se está llevando a cabo un acto denominado Expo Fraude y sabemos que va a estar lleno”, comenta Aurora, de Redes Ciudadanas, quien también vino a la asamblea y se regresa de inmediato.

Ya por la noche, el músico Guillermo Briseño tiene unas palabras para la gente de los campamentos instalados en el zócalo y especialmente para los poblanos en resistencia: “Yo creo que ustedes, los de los campamentos, son los que están diciendo lo que hay que hacer. Nosotros lo que podemos decirles es que estamos con ustedes; es nuestra obligación y que lo que hacemos adquiere sentido por su presencia... y que gracias, primero. Segundo: que buena suerte, y tercero que mucho ojo, porque estamos tratando con los criminales, con los reaccionarios, con los más crueles de los fachistas del mundo y tenemos que tomar en cuenta eso... y que Puebla la tiene muy cercana, muy dentro del estado y que todos lo sabemos... pero todos los que están con su valor y determinación aquí (los campistas) nos hacen sentirnos obligados a estar, y que vamos a estar; así que cuenten con nosotros y que ya sabemos que contamos con ustedes, así que, salud y buena suerte para todos. Viva México, chinga”.

Luego suben las 12 parejas al entarimado y comienza el concurso. La disputa es larga, menos para una sola pareja: las jóvenes poblanas, quienes desde la noche anterior se habían ganado el corazón de los 31 estados y de los capitalinos. Los aplausos y las manos levantadas les dan el triunfo con contundencia. Nadie impugna el resultado de su victoria. Dolores Heredia, coconductora del acto, comenta: “bueno, lo del concurso de “Bailando contra un fraude” fue todo un éxito. Se hizo una selección entre el DF y salieron seis finalistas y seis finalistas de los estados, entonces se fueron eliminando... fue algo increíble... la participación de la gente, y sobre todo el resultado... estas maravillosas mujeres que fueron las ganadoras”. Y para finalizar, Jesusa Rodríguez da unas palabras de aliento al campamento: “para el campamento de Puebla: felicidades por tener mujeres como éstas dos, que verdaderamente dieron una muestra, una lección de fuerza, de gracia y de alegría, y esperemos que la vergüenza del góber precioso desaparezca y puedan ya los poblanos quitar esa ignominia de su historia y caiga el gobernador de Puebla. Porque ya no es posible que siga allí. Y que viva el pueblo poblano que está aquí en resistencia. Muchas gracias.”

Entonces se anuncia que las tres parejas finalistas van a ser recibidas en ese momento por Andrés Manuel López Obrador. Bajan las escaleras y se pierden de vista tras la casa de campaña que utiliza el tabasqueño. Una hora después las poblanas regresan al campamento. Son recibidas con vivas y aplausos. Llevan una bolsa con merengues que Andrés Manuel les ha obsequiado y que ellas a su vez obsequian a los presentes. No es para menos, las poblanas se han ganado con el pulso de su baile a todos los mexicanos: “Yo sólo quiero darle un apapacho a Andrés Manuel por todos ustedes”, había dicho doña Noemí en el escenario. ¿Y le dio un abrazo?, se le pregunta. No, responde; no le di uno... le di dos, uno por todos ustedes y uno por mí. Y echa a reír.

Ya por la mañana, la sonrisa aún no se le borra del rostro a ninguna de las dos. Doña Socorro toma la escoba; está feliz y barre el campamento, con su presencia, todo el sufrimiento que el tribunal electoral ha causado, “que haya traicionado a tantos mexicanos y mexicanas”. Al tiempo que doña Noemí expresa: “me siento satisfecha de haber participado en el concurso “Bailando contra un fraude”, por parte de la coordinadora de Redes de Puebla. A mis 15 años no es para menos, y más por haber tenido el gusto de apapachar a mi presidente y haberle dicho que sobre nuestro cadáver gobernaría Calderón, y que no aceptaremos a un presidente espurio; que ahora no será como en 1810, ni en 1910, ni en 1968. Ahora será otra cosa, porque no nos mataremos entre nosotros; porque el pleito no es contra el pueblo, es contra esos canallas que dizque nos gobiernan”.

Y el día se tiñe de alegría dentro del campamento poblano. El desayuno ya está listo y comienza el octavo día de resistencia civil pacífica. Algo bueno tenía que pasar entre tanta lluvia y tanta bilis.

(Continuará)

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